Para relacionar nuestra salud bucal con nuestra manera de pisar tenemos que partir de la idea de la salud integral, en la que el ser humano es un sistema interconectado y cualquier alteración en cualquier área de este sistema tiene impacto en otras áreas. El hecho de que la forma en la que caminamos y distribuimos el peso de nuestro del cuerpo afecte a nuestra boca es debido a la conexión biomecánica y la postura que va afectando a las diferentes cadenas musculares.
Este desequilibrio postural de la pisada puede afectarnos tanto a problemas de oclusión como problemas de ATM , bruxismo, alteración de la postura… al igual que un desequilibrio en la boca nos puede provocar problemas en la pisada, lo que explica porque a veces tratando los pies solucionamos problemas bucales y a veces que tratando la boca solucionemos problemas de la manera en que pisamos.
Cuando pisamos más por un lado que por otro o tenemos los pies planos, desequilibrios en la longitud de las piernas …. Todo esto afecta a la posición de la columna y por extensión puede llegar a afectar en cuello y cabeza. si esto se mantiene en el tiempo o durante las etapas de crecimiento la mandíbula puede adoptar una posición alterada.
Si la mandíbula no está posicionada de manera correcta puede dar lugar a problemas de la articulación temporomandibular (ATM). Esta conecta con los huesos del cráneo y puede producirse una tensión que produzca dolor, chasquidos, dificultad para la apertura y cierre y la tensión muscular afectará al crecimiento del hueso si está en una etapa de desarrollo, por lo que generará problemas de espacio e influirá en la posición dental.
Esta tensión también provocara bruxismo que desgastara los dientes puede provocar dolores de cabeza y también dolor de la ATM.
En lo referente a la oclusión una mala pisada puede afectar hasta el punto de tener mordida cruzada, sobre mordida o mordida abierta ya que si tenemos algún desequilibrio en los pies las cadenas posturales tienden a compensar y a veces compensan con la mandíbula por lo que este desequilibrio muscular nos puede dar esos problemas de oclusión.
En conclusión, una pisada alterada puede afectar a la postura general del cuerpo y por tanto también a la boca causando problemas musculares y dentales por lo que es importante a la hora de trabajar en boca contar con el apoyo de un especialista como es el podólogo postural para poder dar el mejor servicio y tratamiento a nuestro paciente.
Bibliografía:
- Libro posturologia clinica: bases científicas y abordaje multidisciplinario de Michel Marignan.
- Libro rehabilitación postural oclusal de Mariano Rocabado.
Susana Cano. Higienista dental.
Col. 281032
Responsable de la Comisión de trabajo de Terapias Integrativas del Colegio Profesional de Higienistas Dentales de Madrid.